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Islandia 2024
¿Otra vez Islandia? Otra vez.
La tercera. Para mucha gente es algo raro repetir un viaje fuera de tu país existiendo tantos sitios interesantes en el mundo. Para quien le guste la fotografía, especialmente de paisajes, Islandia debe repetirse. Pero no fue, o no fue solamente, por la fotografía el motivo de repetir viaje. Nos gusta en invierno hacer un viaje a zona fría y estábamos a primeros de noviembre de 2023 sin haber decidido dónde viajaríamos en el 2024. De los sitios que todavía no habíamos estado, a una distancia razonable, nos quedaba Laponia pero teníamos una ‘amenaza’ de tener que hacer ese viaje, como así fue, con un familiar. Y lo que nos apetecía era un lugar por el que pudiéramos desplazarnos por nuestros medios buscando los lugares a nuestro antojo, pues por ejemplo como hicimos en Islandia en 2022. Pues, a Islandia. En el 2022 fuimos muy felices especialmente en 2 sitios, en Stokksnes, en el Café Viking a los pies del Vestrahorn y en la Blue Lagoon. No importa ser felices otra vez, repetimos esos dos sitios. Decididas las fechas, comprados los billetes de avión y reservados los hoteles de Stokksnes y Grindavik, quedaba hacer el plan de viaje. Aunque íbamos a repetir trayecto, en el plan incluimos,fundamentalmente, lugares nuevos. Justamente una semana después de tener las reservas, la ciudad de Grindavik era desalojada por alerta de erupción volcánica y el 18 de diciembre se cumplieron las expectativas. Esperamos unos día a ver la evolución y finalmente decidimos cambiar los días de Grindavik por otro lugar. Encontré varias termas y al final elegimos la Secret Lagoon en Fludir, en la zona del «círculo de oro» por la que pasamos en 2018. Y la última noche la pasaríamos en Reikiavik para tener el aeropuerto a una distancia razonable. Plan completo, tortilla y excursión. El tiempo ha sido infinitamente mejor que en 2022, por eso aparte de sitios nuevos hemos podido volver a intentar lugares que la meteorología nos había impedido acceder en las anteriores ocasiomnes. El caso más excitante ha sido el de Svartifoss en Parque nacional Skaftafell. En 2018 llegué a verla bajo un diluvio y la fotografíe de mala manera antes de ahogarme en la lluvia. En 2022, no lo intentamos, aparte de lluvia torrencial teníamos viento huracanado. Ahora en 2024 la he fotografiado bajo un sol primavera, con todo el tiempo del mundo para plantar el trípode y poner filtros… me sentí feliz. Por supuesto tuvimos lluvia y viento, es Islandia, a veces en momentos inoportunos. También tuvimos tres noches suficientemente despejadas para ver las auroras boreales. Lástima que ninguna de esas tres noches fueron de las dos que pasamos en Stokksnes donde hubiera tenido un marco espectacular. Las vimos en entornos poco fotogénicos y no tan movidas como las de Laponia, pero las vimos y las fotografiamos como pudimos. El equipo de fotografía ha sido el Nikon, D810 con 24-70, 14-24, primer viaje, me ha encantado, y el 70-300. De suplente la X-T1 con un 12 por si acaso, por suerte no ha hecho falta, la Nikon rinde con fiabilidad. Y además, trípode, flash (no usado), disparadores remotos, filtros … Menos mal que tenía ayudante, Navburis, que además de transportar parte del equipo ha aportado su arte para encontrar localizaciones y composiciones. Un éxito el equipo humano y material. Nota: Antes de acabar de publicar esta entrada. el volcán de Grindavik ha vuelto a erupcionar.El come cocos del segundo cuerpo
No tenía yo costumbre de llevar a los viajes dos cámaras, o dos cuerpos de cámara, ni siquiera en los viajes fotográficos. La primera vez fue en el viaje a Tanzania y no fue tanto por pensar en que podía fallar una sino por la incomodidad que iba a suponer estar cambiando de objetivo entre el tele 100-400 para los animalitos y un angular-medio para paisajes y entorno. Pues menos mal porque la X-T3 cascó y me quedé solo con la X-T1. Desde ese viaje ya siempre intento llevar dos. Así lo hice en el reciente viaje a Laponia. Por fortuna no hizo falta tirar de la X-T1.
Con Fuji, está claro de momento el segundo cuerpo. Pero y ¿Para un viaje que lleve Nikon? pues no está tan claro y llevo dándole vueltas varias semanas. Siguiendo el esquema de Fuji, la candidata suplente es la D200. Pero cuando la pongo en una bolsa para viajar veo que es grande y pesada, prácticamente lo mismo que la D810, no en vano fue en su momento la segunda cámara profesional de la marca. La ventaja es que valen todos los objetivos pero la gran desventaja, aparte de volumes y peso, es que usa otro tipo de batería incompatible y tendría que llevar cargador y baterías ex profeso. Para rematar, poca resolución 10 megapixeles y sensor muy ruidoso, casi inútil a partir de 800, fatal para fotos nocturnas. Descartada. Idealmente tendría que ser un cuerpo más pequeño de cámaras que compartan la misma batería, podría ser un D7100 o una D610. Pero no voy a comprar una nueva de un sistema que ya no tiene recorrido a medio plazo (Nikon se ha pasado a las sin espejo, las Zs, con una nueva montura). Miré de segunda mano pero lo más barato 400 €. Demasiado, por 200 a lo mejor, pero no las hay. Otra idea ¿Invertir en una cámara pequeña pero capaz que pudiera servirme para situaciones que no puedas o no debas llevar una cámara grande? Sin ir más lejos conduciendo un trineo de perros :D, y también para que Navburis lleve una cámara ligera. Si vamos con equipo Nikon, la más pequeña es la Z30. La batería incompatible, los objetivos requerirían un adaptador. Y 700 € ¿merece la pena? Si tuviera claro que Navburis la iba a usar si, pero para cuerpo suplente parece demasiado dinero. Busco también en otras marcas algo pequeño pero no encuentro nada que dé la talla para el tipo de fotografía que hago por un precio razonable. Finalmente al viaje va la X-T1 a pesar de su estado de desgaste. Lógicamente la batería es incompatible pero el cargador es pequeño. Es ligera y de tamaño muy comedido. Los objetivos no pueden usarse pero me llevo uno Fuji, el 12 correcto para lo que voy a hacer principalmente, paisajes, y a esperar no tener que usarlo.