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Wandrd Prvk

NOTA: A modo de prólogo. Esta entrada la empecé en primavera cuando se cumplía el primer año de tener la mochila pero me ha costado tanto acabarlo que casi estamos en invierno.

Hace un año que tengo la mochila Wandrd Prvk Lite. No suelo hacer muchos comentarios sobre equipo fotográfico pero esta vez me apetece hablar de esta mochila. No va a ser una revisión técnica, ni mucho menos. Solo impresiones y experiencias.

Durante muchos años estuve utilizando una mochila Lowerpro Photo Hatchback 16L para los viajes. Una mochila pequeña, donde cabía poco equipo fotográfico porque tenía casi media mochila reservada para lleva otro tipo de objetos como ropa, documentación, artículos de limpieza …. Claro que ese espacio también podía dedicarlo para equipo, pero poco, si acaso para filtros y disparadores.

En La Rocina, Huelva, foto por Navburis

En La Rocina, Huelva, foto por Navburis

El caso es que con el tiempo los materiales de la mochila se fueron desgastando y deteriorando. Después del viaje a las islas Lofoten ya decidí que había que renovarse y me puse a buscar una nueva mochila. El modelo de Lowerpro ya no se fabricaba así que había que buscar otra, con más o menos parecidas características: No muy grande para evitar la tentación de llenarla y llevar mucho peso y luego resentirme de la espalda, pero si que fuera suficiente para llevar el mínimo equipo fotográfico de viaje, y que tuviera un espacio que pudiera dedicar a enseres de viaje. Bueno, si podía conseguir algo mas espacio, sin pasarse por el peso, mejor pues en la Lowerpro con dificultad podía meter la D810 con el 24-70 y ya no cabía nada más. Ah y que pudiera engancharse el trípode.

Wandrd Prvk en El Hierro

Wandrd Prvk en El Hierro

Hice una amplia prospección del mercado de mochilas, y en una primera selección me quedé con un par de modelos de LowerPro, la PeakDesign EveryDay 20L, la Wandrd Prvk Lite y la 21L y la Kiboko City Commuter 18L. MIiré cualidades, calidades y sobre todo, dimensiones y capacidades.La que más me gustaba era la Kiboko pero tenía un problema, no se vende en España, debería compararla en USA y pagar transporte, si ya era cara pues más. Y luego la duda de si no me convencía ¿cómo devolverla?. En cambio, la segunda opción la Wandrd Prvk Lite la podía comprar en Amazon España con lo que si luego al meter el equipo no me gustaba, la devolución era fácil. Así que esa fue mi compra final.

Lo primero que hice al recibirla fue comprobar la capacidad y comprobar que el equipo básico de viaje X-T3/18-135 cabía. De sobra, y con espacio para más equipamiento. Lo siguiente fue probar si la D810 con 24-70 entraba, y sí pero con un pequeño pero, con la placa en L para el trípode la altura es mayor que la de la abertura lateral para sacar la cámara sin quitarte la mochila totalmente. Bueno pequeño inconveniente. Desde luego por capacidad no me puedo quejar, he llevado la X-T3 con el 18-135, el 12 y el 100-400 y la D810 con el 14, el 24-70 y el 70-3000. En los dos sistemas un rango de focales más que amplio. Expectativas superadas.

Bahía del Monte Saint-Michel, junio 2024, foto por Garnaven

Bahía del Monte Saint-Michel, junio 2024, foto por Garnaven


La siguiente comprobación era el espacio para ropa y otros cachivaches. No tenía muy claro si me iba a apañar con el compartimento superior enrollable. De primeras comprobé que la capacidad era buena como para meter sin problemas un buen chubasquero así que bien de capacidad. La experiencia de enrollar y desenrollar que me daba muchos reparos es buena. El material es robusto y el velcro parece duradero. Tal vez lo que menos me gusta es que en la parte interior no haya ningún tipo de bolsillo en el que puedas guardar objetos tipo documentos. El espacio es un puro saco, lo mejor es que lleves las cosas organizadas en estuches o pequeñas bolsas. Pero muy contento del rendimiento y prestaciones que me ha dado ese compartimento desplegable en los viajes.
Wandrd Prvk, el único deterioro, una costura.

Wandrd Prvk, el único deterioro, una costura.

Y la última preocupación ¿Podré llevar un trípode? Bueno aquí de primeras pinchamos, el bolsillo lateral que supuestamente podía valer para una botella o un trípode no lleva ninguna correa o sujeción en la parte superior, así que nada, para trípode no. Tuve que comprar unas correas adicionales. Con estas correas si se puede sujetar el trípode en la parte frontal aunque no termina de ser muy cómodo pues tiende a aflojarse y oscilar de un lado a otro. Puedo llevar un trípode, sí, pero no es muy confortable. Pero bueno pues las tres cosas que buscaba, suficiente espacio para el equipo fotográfico que llevo en un viaje, un espacio para ropa y accesorios y posibilidad de enganchar el trípode, las tiene.

Wandrd Prvk con el trípode

Wandrd Prvk con el trípode

Pero al final son más detalles los que te hacen sentirte cómodo con una mochila. Materiales: Impresionantes. Aparte de la sensación de durabilidad, no se ensucia y si le cae barro, polvo o arena se limpia fácilmente. Las cremalleras corren fluidas. Me ha caído más de una lluvia fuerte y tiene un nivel alto de permeabilidad, no se me ha mojado nada en el interior. Se lleva muy bien en la espalda, se ajusta bien y la correa pectoral es muy eficaz para repartir el peso cuando hay que andar largas distancias o durante mucho tiempo. Resulta cómoda de llevar.

En cuanto a bolsillos y espacios para guardar cosas tal vez podría mejorarse. La parte frontal tiene uno largo y estrecho pensado para papeles ¿Quién lleva papeles hoy en día? Pero la realidad es que cuando he tenido que llevar alguno ha sido muy útil y cómodo. También cabe, sin abultar mucho, la tablet que a veces la pongo ahí para acceder de forma más rápida al subir a un avión que en su compartimento interior específico. Y desde hace un tiempo aloja un funda de lluvia para la cámara que está sin estrenar.

Con la Wandrd Prv Lite en Islandia, foto de Navburis

Con la Wandrd Prv Lite en Islandia, foto de Navburis

En los laterales, en uno, la abertura para sacar la cámara, muy útil para mi en viajes de ciudad, con la X-T3 y el 18-135, y en el otro lado, un bolsillo ajustable con cremallera pensado para encajar botellas pero que tienden a salirse y al final en este acabo metiendo llaves, móvil, … No muy conseguido. En la zona ya de la espalda en la parte superior, un bolsillo con cremallera muy útil para guardar documentación pues con la mochila a la espalda es muy complicado que nadie pueda acceder a él aparte de que está bastante disimulado.

Mochila a tope

Mochila a tope

Por la espalda es por donde se abre, mediante dos cremalleras, el interior de la mochila a modo de concha, cáscara, (clamshell). Una vez abierto tienes un acceso completo al contenido en dos lados. En el lado más profundo tienes la zona de equipo con separadores para acoplar objetivo y lentes a tu gusto y en la otra cara, la tapa, tienes el bolsillo para tablet o portátil pequeño y otros tres bolsillitos de poca capacidad donde llevo gamuzas para limpiar y tarjetas de memoria, poca cosa. No muy útiles.

Resumiendo, muy contento con el juego que me está dando la mochila, sobre todo por la comodidad, durabilidad y capacidad, que superan de largo los inconvenientes de los bolsillos poco prácticos.

Superluna 17 de octubre de 2024

La gente de PhotPills hicieron una convocatoria mundial para fotografiar la superluna de octubre, la luna del cazador, en varios puntos del planeta y entre ellos Madrid. Me apunté y ese jueves, venciendo la pereza, me presenté puntual en la zona del punto de disparo. Objetivo: Fotografiar la luna por detrás del pirulí a unos 12,5 kilómetros de distancia de este para obtener una luna aparentemente enorme. No conseguí exactamente la foto objetivo, no caí en la cuenta de la importancia del punto de disparo y me situé unos metros a la derecha del lugar exacto para obtener el encuadre deseado. Para cuando la luna surgió completa me quedó desplazada del centro de la torre.

Superluna, Madrid, octubre 2024

Superluna, Madrid, octubre 2024

Pero bueno, lo que me importaba era ir para lidiar con la parte técnica y adquirir experiencia. Y considero que fue una buena formación. Hubo cosas que hice bien del tirón como poner la exposición para capturar la luna, pero fui un tanto torpe con manejar el encuadre con el trípode. El objetivo era el 100-400 al que le puse el duplicador porque veía el pirulí muy lejos con lo que se convirtió en un 200-800. A 800 cualquier mínimo movimiento te desplaza el encuadre y la verdad es que el trípode de viaje no tiene una rótula solida para aguantar el peso de ese objetivo, se movía aunque apretara los tornillos de sujección.
Bona nit Madrid, octubre 2024

Bona nit Madrid, octubre 2024

Además la zapata que lleva el objetivo, no puedes usar el de la cámara pues queda desequilibrado, no es muy bueno y no quedaba bien enganchada. Había algo de viento, ¡y nubes! tuvimos suerte que hubo un claro por dónde acabó apareciendo la luna, con lo que a la mínima todo se movía y tenía que reencuadrar. Para este tipo de foto, de peso de equipo, es mejor el pesado trípode Manfroto. En fin, con 1/125 para que la luna no quedara movida, se mueve rápida, y con la abertura máxima posible f9, el ISO se fue a 3200, bastante ruido. Al final no tengo una foto impecable pero sí resultona.

El come cocos del segundo cuerpo

No tenía yo costumbre de llevar a los viajes dos cámaras, o dos cuerpos de cámara, ni siquiera en los viajes fotográficos. La primera vez fue en el viaje a Tanzania y no fue tanto por pensar en que podía fallar una sino por la incomodidad que iba a suponer estar cambiando de objetivo entre el tele 100-400 para los animalitos y un angular-medio para paisajes y entorno. Pues menos mal porque la X-T3 cascó y me quedé solo con la X-T1. Desde ese viaje ya siempre intento llevar dos. Así lo hice en el reciente viaje a Laponia. Por fortuna no hizo falta tirar de la X-T1.

Helsinki, febrero 2024

Helsinki, febrero 2024

Con Fuji, está claro de momento el segundo cuerpo. Pero y ¿Para un viaje que lleve Nikon? pues no está tan claro y llevo dándole vueltas varias semanas. Siguiendo el esquema de Fuji, la candidata suplente es la D200. Pero cuando la pongo en una bolsa para viajar veo que es grande y pesada, prácticamente lo mismo que la D810, no en vano fue en su momento la segunda cámara profesional de la marca. La ventaja es que valen todos los objetivos pero la gran desventaja, aparte de volumes y peso, es que usa otro tipo de batería incompatible y tendría que llevar cargador y baterías ex profeso. Para rematar, poca resolución 10 megapixeles y sensor muy ruidoso, casi inútil a partir de 800, fatal para fotos nocturnas. Descartada.
Aurora, Inari febrero 2024

Aurora, Inari febrero 2024

Idealmente tendría que ser un cuerpo más pequeño de cámaras que compartan la misma batería, podría ser un D7100 o una D610. Pero no voy a comprar una nueva de un sistema que ya no tiene recorrido a medio plazo (Nikon se ha pasado a las sin espejo, las Zs, con una nueva montura). Miré de segunda mano pero lo más barato 400 €. Demasiado, por 200 a lo mejor, pero no las hay.
Obras, obras, Madrid febrero 2024

Obras, obras, Madrid febrero 2024

Otra idea ¿Invertir en una cámara pequeña pero capaz que pudiera servirme para situaciones que no puedas o no debas llevar una cámara grande? Sin ir más lejos conduciendo un trineo de perros :D, y también para que Navburis lleve una cámara ligera. Si vamos con equipo Nikon, la más pequeña es la Z30. La batería incompatible, los objetivos requerirían un adaptador. Y 700 € ¿merece la pena? Si tuviera claro que Navburis la iba a usar si, pero para cuerpo suplente parece demasiado dinero. Busco también en otras marcas algo pequeño pero no encuentro nada que dé la talla para el tipo de fotografía que hago por un precio razonable.
Atardecer, Marjal del Moro, enero 2024

Atardecer, Marjal del Moro, enero 2024

Finalmente al viaje va la X-T1 a pesar de su estado de desgaste. Lógicamente la batería es incompatible pero el cargador es pequeño. Es ligera y de tamaño muy comedido. Los objetivos no pueden usarse pero me llevo uno Fuji, el 12 correcto para lo que voy a hacer principalmente, paisajes, y a esperar no tener que usarlo.

Desperezando

Calamón común, Marjal del Moro, enero 2024

Calamón común, Marjal del Moro, enero 2024

Ya he hecho una salida fotográfica este 2024. Realmente era un paseo por la Marjal del Moro, pero como ya sabiamos que hay mucha ave acuática, iba armado con el Fujinon 100-400 y su duplicador. Y tuve buena caza! Tengo dos animmalitos nuevos en la colección fotográfica: el calamón común y la cerceta.
Aguiluchos laguneros, Marjal del Moro, enero 2024

Aguiluchos laguneros, Marjal del Moro, enero 2024

Y también también pillé un lagunero, bueno dos, y aunque no es nuevo, ya había fotografiado algún ejemplar anteriormente pero eran fotos bastante malas y alejadas, está fotografía es muy llamativa. En la Marjal del Moro se pueden observar varios ejemplares de lagunero, siempre alejados y casi siempre a ras de las altas cañas lo cual te complica mucho el enfoque. En esta captura estaba siguiendo al aguilucho de arriba que había conseguido tenerlo a foco y le disparé. Más tarde, en casa, al revisar la foto vi que un segundo lagunero se había cruzado por debajo en el momento de disparo. ¡Qué gran casualidad!
Cerceta, Marjal del Moro, enero 2024

Cerceta, Marjal del Moro, enero 2024

Estoy muy contento con el 100-400, lástima que Fuji no tenga un mejor acabado en las cámaras. La última pega de la X-T3 es que se ha despegado la goma del ocular del visor. A comprar un repuesto. Si con los cuerpos estoy molesto, con los objetivos estoy contento. El 100-400 pesa, pero es soportable. No tiene mucha luminosidad, si pones el duplicador la apertura se sitúa en f9 con lo que las fotos son un poco ruidosas y el desenfoque (bokeh) no es muy bonito, no es un desenfoque cremoso como el que se obtiene con un objetivo focal de f2.8. Pero enfoca muy bien, se ve muy bien en el visor óptico y el resultado es bastante nítido. El equilibrio entre peso, luminosidad, precio y calidad es muy satisfactorio.