Rosa de los vientos, Torre de Hércules, marzo 2018
No es nada bueno desear la muerte de una persona, pero cuando esta personal es la principal responsable de miles de muertos y de millones de sufrimientos… es inevitable. Putin. Una de esas personas donde reside la semilla del mal, donde no hay lugar para pensar que la vida de otros es tan importante como la suya. Pero las vidas de otros son, por su puesto, infinitamente más importantes que sus fines en esta vida que, lamentablemente, pero intensamente, muchos deseamos se le acabe cuanto antes. De este tipo no sé de su infancia, si fue un niño feliz o desgraciado, o a ratos como todos. Pero si conocemos su currículum profesional: Miembro de la KGB, policia político indudablemente acostumbrado al fango de las cloacas del estado. Todos los servicio de inteligencia de cualquier estado son un pozo de podredumbre donde la ética no cabe, solo cabe la «razón de estado». Pues esta razón de estado en la extinta Unión Soviética daba para mucho mal.
San Petersburgo, julio 2019
Así Putin tuvo un gran escuela para aprender como subir al poder a base de ir exterminado rivales políticos. Por ejemplo envenenando con sustancia radiactiva a Alexander Litvinenko, o con una toxina nerviosa a Alekséi Navalni. El fin justifica los medios hasta su última consecuencia. Seguramente, al Putin joven, la caída de la Union Sovietica la debió sentir como una derrota muy humillante. No creo que para sus principios, dudo que en la URRS nadie fuera ya comunista, pero si para ese orgullo de pertenencia a una gran potencia militar que en cierta forma dirigía medio mundo. El poder!, el fin último, justificado en la grandeza de la patria.
Peterhof, Rusia julio 2019
No hay duda que ha sido muy hábil, llegar hasta donde ha llegado. Ha sabido convivir con los buitres que se enriquecieron en la descomposición de la URSS: Los
oligarcas. Oportunistas que aprovecharon su buena situación en el régimen para hacerse con el poder económico en la privatización de las empresas y bienes públicos. Nefasta simbiosis que ha dejado a Rusia, a su gente, estancada en un limbo entre el zarismo y el comunismo. Esperemos que un cáncer galopante, un infarto súbito, o un puñal por la espalda, acaben pronto con él.
Fortaleza de San Pedro y San Pablo, Rusia julio 2019
Pero como europeo hago autocrítica. ¿dónde está la diplomacia de la UE? A Putin se le ha visto venir desde hace años. Claro que mientras se pasaba de tirano en su país, o arrasaba Chechenia, Georgia, Siria,… no importaba, estaban lejos. La fragmentación de la sociedad ucraniana era clara entre europeistas y rusofilos ¿La UE se preocupó de que hubiera un respeto entre las distintas opciones de los ucranianos? No, rápidamente, como carroñeros, se pusieron de parte de lo que le interesaba sin fijarse en derechos humanos o democracia, lo que se supone son los símbolos que identifican a Europa. Primero el dinero, luego los principios. El injustificable argumento de Rusia para invadir Ucrania es realmente más sólido que el que hubo para invadir Irak, «eliminar armas de destrucción masiva». Con aquello se dio un ejemplo de todo vale que ha puesto el listón ético muy bajo. ¿Por qué sigue existiendo la OTAN? Debió desaparecer cuando se disolvió la URSS.
Recuerdos del muro, Berlín 1999
¿Por qué la pertenencia a la UE signifca en la práctica pertenencia a la OTAN? La Unión Europea debería tener su propia estrategia defensiva sin depender de otros y menos de una organización trasnochada que lo único que hace es mantener vivos fantasmas del pasado. Y ser fieles a los
principios fundamentales de la Unión.
VLC, marzo 2019
Los europeos debemos pedir a nuestros políticos más coherencia en comportarnos de acuerdo a nuestros valores y no dejarse llevar por «oportunidades de negocio’. Algunos países europeos, como España, se han otorgado la residencia a extranjeros,
golden visa, solo por invertir dinero, sin preguntar por el origen del dinero y por ahí tenemos a un montón de rusos de dudosa ética viviendo por aquí tan ricamente. Sin embargo a los nacionales se nos vigila, o se pide a las entidades financieros que nos vigilen, por si blanqueamos dinero… Qué vergüenza
Del beso nace la vida, Barcelona febrero 2022
Malos tiempos para un convencido pacifista como yo.