La «crisis económica» que sufrimos no me da que sea simplemente una crisis que pasará en algún momento. Tengo la sensación que es un cambio de modelo, de época. Para empezar esta provocando ciertas ranuras en la cohesión de los países de la Unión Europea. Por otro lado cada vez noto más desconfianza de la sociedad hacia el sistema financiero. La credibilidad de los profesionales y políticos está bajo mínimos. La única salida que parece que tienen en mente es el recorte de los beneficios sociales. Entonces ¿de que nos sirve tanta parafernalia estatal?

Y no solo es la cuestión financiera, hay otros indicios que percibo. Hay cambios en los valores, ahora veo muchas oportunidades donde se valora más lo colectivo (patria, religión) por encima del individuo. Lo malo malo es cuando nos encontramos que hay muchas patrias y muchas religiones, y todos empeñados que la suya es la mejor, la única, la verdadera. Foco de conflictos asegurado..

Artista callejero, Madrid noviembre 2010

Artista callejero, Madrid noviembre 2010

Y más cambios que van a condicionar la vida futura. A mi no me extraña lo revelado por Wikileaks ya que las cloacas del estado son siempre unas cloacas. Y no hay estado que no las tenga. Poderosa razón la del estado. Lo que si impresiona es que en este mundo globalizado hay determinadas cosas que estábamos acostumbrados a tener y se van a perder. Nadie ni nada va a estar a salvo de tener sus actos ocultos. Voluntariamente (redes sociales) o involuntariamente (descuidos, filtraciones, hackers …) todo sale a la luz.

Tiempos de cambio, tal vez interesantes desde el punto de vista histórico, pero los que hemos vivido la feliz época de la segunda mitad del siglo XX son tiempos pavorosos.

Todo esto en el mundo occidental, el primer mundo. Por que en otros sitios todo sigue igual, se mueren de hambre.