Es el nombre del día. Según todos los medios de comunicación nos encontramos con un momento histórico. Si lo juntamos con otro momento histórico, el descalabro del sistema financiero liberal, resulta que estamos viviendo todo una época apasionante, que hará cambiar el mundo. Tiempos interesantes … Pues vaya a ver en que acaba la cosa: ¿paro? ¿revueltas sociales? ¿hambre? ¿guerras urbanas en una sociedad sin control ni autoridad? ¿apagón tecnológico? ¿escasez de energía? ¿oscuridad cultural? Bueno todo esto lo tiene Africa desde hace mucho.
Volviendo al tema. Parece que Obama al menos trae de primeras otro aíre al gobierno del imperio. Parece que va a ser un emperador menos prepotente con más preocupación por lo social y lo ecológico que de la pura razón de estado. Parece. En cualquier caso lo prefiero a los otros.
He repasado con ilusión y luego con decepción mis diapositivas del viaje por aquellas tierras en 1991.
Esta foto del cartel de un garito de Nueva Orleans es de lo poco que he encontrado con una cierta gracia. No fue un viaje en lo fotográfico productivo, si en en el resto. Puse una película de luz de tungsteno en vez de luz de día, luego se me estropeo el fotómetro. Menos mal que la FM2 funciona aún sin pilas, eso ya no ocurre.
Hoy he soñado que hacía un viaje a tierras desconocidas y exóticas. Había serpientes naranjas muy largas arrastrándose por la carretera. También casas bajas con viejecillos entrañables. Entonces me daba cuenta de que había olvidado mi cámara de fotos. Tenía un mes de viaje por delante y no tener la cámara se convertía en una auténtica pesadilla, una obsesión. Veía la realidad recuadrada, como a través del objetivo. Cada paso que daba veía una foto y no podía inmortalizarla. Aaaaaaaaaaaaaah!