Tenía que ir mentalmente preparado. El miedo no debía hacerme perder la dignidad :D. Recurrí a una treta mental que ya he utilizado varias veces en mi vida. Consiste en vivir en una situación como si estuvieras viviendo otra. En este caso ¿qué situación podría parecerse a una cirugía? Pensé en los viajes, cuando inicio un viaje siempre estoy inquieto, con la duda de si saldrá bien, pero sabes que si sale bien, y siempre me han salido bien, luego los disfrutas enormemente. Este era un viaje, con su incertidumbre pero con un resultado prometedor, una vida sin dolor. Así la tarde del 19 de febrero de 2021 con mi mejor disposición y alegría entré al quirófano en camilla pero con la sonrisa debajo de la mascarilla. Creo que la buena disposición ayudó a que la intervención y el periodo de hospitalización pasaran de la mejor forma posible. También en casa. La primera semana esperada «de dolores» pasó sin mayor problema. Ahora estoy en la octava semana desde la operación. (Sí, ha pasado tiempo, cada vez tardo más en escribir y encontrar o hacer fotos para acompañar) No voy a extenderme ahora en cómo he pasado y en qué me he ocupado en el tiempo de recuperación. Iré contando …, solo decir que a pesar de momentos de duda, y con alguna pequeña secuela, estoy bien y apunto de poder hacer mi vida normal.
Tenía que ir mentalmente preparado. El miedo no debía hacerme perder la dignidad :D. Recurrí a una treta mental que ya he utilizado varias veces en mi vida. Consiste en vivir en una situación como si estuvieras viviendo otra. En este caso ¿qué situación podría parecerse a una cirugía? Pensé en los viajes, cuando inicio un viaje siempre estoy inquieto, con la duda de si saldrá bien, pero sabes que si sale bien, y siempre me han salido bien, luego los disfrutas enormemente. Este era un viaje, con su incertidumbre pero con un resultado prometedor, una vida sin dolor. Así la tarde del 19 de febrero de 2021 con mi mejor disposición y alegría entré al quirófano en camilla pero con la sonrisa debajo de la mascarilla. Creo que la buena disposición ayudó a que la intervención y el periodo de hospitalización pasaran de la mejor forma posible. También en casa. La primera semana esperada «de dolores» pasó sin mayor problema. Ahora estoy en la octava semana desde la operación. (Sí, ha pasado tiempo, cada vez tardo más en escribir y encontrar o hacer fotos para acompañar) No voy a extenderme ahora en cómo he pasado y en qué me he ocupado en el tiempo de recuperación. Iré contando …, solo decir que a pesar de momentos de duda, y con alguna pequeña secuela, estoy bien y apunto de poder hacer mi vida normal.